Revalorización de la Escolástica en la formación del pensamiento económico

Fabian_Estapé.jpegEn varias oportunidades hemos llamado la atención de nuestros lectores, solicitando se preste mayor atención al pensamiento de los escolásticos como raíz del moderno pensamiento económico (véase por ejemplo, aquí y aquí). En este post comparto un hallazgo de la web con una breves referencias del Académico de Número, Excmo. Sr. D. Fabián Estapé Rodríguez (1923-2012), quien en la sesión del día 10 de octubre de 1995, ofreció ante el Presidente de la Academia Española, algunas palabras acerca de la revalorización de la Escolástica en la formación del pensamiento económico. En la nota referencia los conocidos trabajos de Schumpeter (1954), Raymond de Roover (1958) y Grice-Hutchinson (1978), esta última alumna de Friedrich Hayek. Más tarde llegarán otros aportes de Alex Chafuén, Murray Rothbard y Jesús Huerta de Soto que profundizan esta revalorización.

Estas notas que pretenden despertar el interés hacia el momento culminante de la aportación del pensamiento económico español a la formación del análisis económico, no pueden ir mucho más lejos de esta visión panorámica, que se enriquece -en mi opinión- con el reconocimiento manifiesto, sobre todo en Estados Unidos y en Gran Bretaña, de la existencia de una verdadera Escuela, la Escuela de Salamanca, que con gran intuición supo adivinar nuestro malogrado compañero José Larraz. Ahora, en un descargo de conciencia, debemos solicitar la benevolencia de filósofos y pensadores, en general, porque, como señalara José Ferrater Mora, los economistas hemos incurrido en el «vicio» de hacer sinónimo el pensamiento escolástico y la Filosofía medieval. Son, como sabemos hoy todos, cosas distintas y a veces contrapuestas. Constituye una destacada satisfacción registrar la incesante labor de la distinguida discípula de Friedrich van Hayek, en la London School of Economics, las tantas veces citada Marjorie GriceHutchinson, merecida Doctora Honoris Causa -aunque el título se halla un tanto devaluado. Lo mismo cabe decir, y siempre desde la trinchera de la gratitud, de Raymond de Roover y Jean y Pierre Vilar. Mi conocida formación -que no es un secreto para ninguno de ustedes- me obliga a cerrar esta intervención con la referencia inexcusable a la Historia del Análisis Económico de Joseph Alois Schumpeter.

Acceda aquí al documento completo.

Un reaccionario radical: El pensamiento político de Murray N. Rothbard

RothbardCompartimos una columna de Miguel Anxo Bastos Boubeta acerca del pensamiento político de Murray N. Rothbard. Invitamos a los lectores a compartir reflexiones acerca de su pensamiento.

So what should we call ourselves? I haven’t got an easy answer, but perhaps we could call ourselves “radical reactionaries”, or “radical rightists “, the label that was given to us for our enemies in the 1950s. Or , if there is too much objection to the dread term “radical” , we an follow the suggestion of some of our group to call ourselves “ the Hard Right”. Any of these terms is preferible to “conservative”, and it also serves to the function of separating ourselves out from the official conservative movement which, as I shall note in a minute, has been largerly taken over by our enemies. – Murray N. Rothbard. “A Strategy for the Right!”

1. INTRODUCCIÓN

El pensamiento político de Murray N. Rothbard ya comienza a ser bien conocido entre nosotros gracias al resurgir reciente de la escuela austríaca de economía (Huerta de Soto, 2000), de la que Rothbard fue uno de sus más destacados miembros, y a la traducción al español de algunas de sus obras principales, como su monumental obra póstuma Historia del pensamiento económico (Rothbard,1999a)[2]. No así su pensamiento político y social, injustamente relegado entre nosotros a notas a pie de página en los manuales de teoría política [3] a pesar de que contribuye a inaugurar una de las tradiciones más fértiles de la derecha norteamericana el anarcocapitalismo o libertarianismo radical (Zoll, 1971; Gottfried, 1993), sintetizando en una obra de profunda originalidad elementos extraídos de la economía austríaca, la teoría política lockeana y la filosofía iusnaturalista (Barry, 1983; 1986). Rothbard fue un científico social interdisciplinar que abordó de forma interrelacionada el estudio de la economía, la política, la historia y la filosofía de las ciencias sociales como ciencias de la acción humana rechazando por sistema en todo momento la pretensión de estudiarlas desde paradigmas metodológicos formales provenientes de las ciencias naturales (Rothbard 1997a; 1997b; 1997c). Su pensamiento político es de una gran coherencia a lo largo del tiempo, centrado siempre su crítica en la naturaleza esencialmente predatoria y coercitiva del estado, su aislacionismo en política exterior, su visión elitista de las relaciones entre estado y sociedad y su libertarianismo radical, que lo llevó a idear un orden político libertario. No así su práctica política, que osciló de derecha a izquierda, pasando por su decisiva participación en la fundación del Libertarian Party norteamericano, volviendo a apoyar al fin de su vida plataformas de derecha dura, pero siempre defendiendo las mismas ideas y siendo, en sus propias palabras, más radical cada día en su defensa (Raimondo, 2000).

En este trabajo pretendemos realizar una aproximación a los aspectos más originales de su pensamiento político, sin pretender abordar aquí, por las características de este trabajo, el estudio ni de sus aportaciones a la ciencia económica ni de las raíces filosóficas de su pensamiento, que ya fueron tratadas, con matizada animosidad [4] en la obra de Sciabarra (Sciabarra, 2000) o con más simpatía en el trabajo de Powell y Stringham (Powell and Stingham , 2004). Rothbard no precisa de introducciones para ser leído (él mismo dijo en una entrevista, que ahora no logro localizar, que la diferencia entre Mises y Keynes era que el segundo precisa de libros introductorios para ser entendido mientras que Mises puede ser leido direc- tamente por una persona culta lo que probaría su superior claridad de ideas) pues su prosa es asombrosamente clara, incluso para un lego en estas materias , por lo que este trabajo lo único que pretende es llamar la atención sobre uno de los pensadores políticos, a mi entender, más importantes del siglo XX y procurar que sus ideas entren en el debate académico hispano.

Sigue leyendo

El erudito extremista: Juan de Mariana

RothbardUno de los últimos escolásticos españoles fue un jesuita, pero no un salmantino. Fue el “extremista” contemporáneo de Molina y Suárez, Juan de Mariana (1536-1624). Mariana nació cerca de Toledo, de padres pobres y humildes. Ingresó en la gran Universidad de Alcalá en 1553, brilló como estudiante y un año después se incorporó a la nueva Compañía de Jesús. Después de completar sus estudios en Alcalá, Mariana fue a la Universidad Jesuita en Roma en 1561 para enseñar filosofía y teología y después de cuatro años se trasladó a Sicilia para establecer en la Universidad Jesuita de ese lugar el programa de teología. En 1569, Mariana se mudó a enseñar teología a la gran Universidad de París a la temprana edad de 33 años. Después de cuatro años, su mala salud le obligó a retirarse a vivir a Toledo; sin embargo una mala salud no significa necesariamente una corta vida y Mariana vivió hasta la entonces respetable edad de 88 años.

Por Murray Rothbard

Sigue leyendo

El proceso de mercado, la visión de Salerno sobre Mises, Hayek y Kirzner

SalernoHoracio Miguel Arana, profesor de la Universidad Abierta Interamericana, discute en este paper la lectura que Joseph Salerno presenta de Ludwig von Mises (Mises and Hayek Dehomogenized). En esta visión, Mises tendría cierta consistencia con Rothbard, contraria a su vez, a las ideas de otros autores de la tradición como Hayek y Kirzner.

El autor concluye:

Luego del análisis realizado en los párrafos precedentes, parece cuando menos exagerada la pretensión de Salerno de diferenciar las posiciones de Ludwig von Mises por un lado y la atribuida a Friedrich von Hayek e Israel Kirzner por otro, como si fueran paradigmas alternativos dentro de la Escuela Austriaca de Economía.

El tema lo hemos discutido ampliamente en este blog, por lo que imagino será de interés para nuestros lectores.

Belesbat, Boisguilbert y el orden natural del libre mercado

RothbardEl utilitarista del laissez faire: El Señor de Belesbat

Uno de los pensadores antimercantilistas y favorables al laissez faire más influyentes de las últimas décadas de Luis XIV fue Charles Paul Hurault de l’Hopital, Señor de Belesbat (¿? – 1706). Biznieto de un canciller de Francia, Belesbat fue durante la década de 1690 un miembro influyente de un salón de oposición política en el palacio de Luxemburgo en el distrito de los jardines de Luxemburgo en París. El salón se reunía semanalmente en casa del primo hermano de Belesbat, François Thimoleon, Abad de Choisy.

Por Murray N. Rothbard

Sigue leyendo

Una entrevista con Stephan Kinsella

KinsellaDiego Aguirre tradujo al español para el Mises Hispano, una entrevista de Keir Martland a nuestro amigo libertario Stephan Kinsella. Copiamos abajo sólo un extracto, pero el lector puede leer aquí la entrevista original y completa en inglés, o aquí su versión en español.

Acerca de por qué soy libertario y como defino al liberarianismo explico algo al respecto en  Cómo Me Convertí en Libertario (publicado como  “Being a Libertarian” en I Chose Liberty: Autobiografías de Libertarios Contemporáneos, compilado por Walter Block; Mises Institute 2010) y también en  Qué Es Libertarismo .

Tengo 47 años y soy un abogado de patentes en Houston; nací en Louisiana. Siempre me interesaron la ciencia y la literatura, y durante la secundaria, aproximadamente en  11avo. grado, un bibliotecario de mi escuela católica me sugirió que leyera “El Manantial”.  Ello intensificó mi interés en la filosofía y generó mi interés en economía (Austríaca, en particular) y en teoría política. Esto ocurrió aproximadamente en 1980, hace 33 años, cuando yo tenía unos  15. Todo esto me fascinó rapidamente y cuando llegué a la universidad (a estudiar ingeniería eléctrica), devoré montones de trabajos sobre filosofía, economía, teoría política, incluídos los trabajos de Rand, Milton Friedman, Iuego Bastiat, Rothbard, los Tannehills. Para el tiempo en que concurrí a la escuela de leyes, en 1988, me estaba volviendo un anarquista-libertario-Rothbardiano-Austro-Misesiano y pronto fui muy influenciado por el pensamiento de Hans-Hermann Hoppe.

Al principio concebí la libertad y el libertarismo en terminos del principio o axioma de no agresión. A medida que aprendí mas sobre historia, economía, política, filosofía, anarquismo y ley, intenté refinar mis puntos de vista, y hoy pienso que el principio de no agresión es más un sumario o consecuencia de visiones más primarias. Pienso que el libertarismo se describe mejor como la filosofía política desarrollada desde la “normas básicas” de pro-paz, pro-cooperación, pro-valores de prosperidad como intuiciones económicas informadas.

Pienso que el libertarismo es la visión de que las únicas normas políticas que se justifican son aquellas compatibles con los valores que actualmente son sostenidos, y que necesariamente deben ser sostenidos por gente comprometida en la búsqueda civilizada, racional y pacífica de normas. El libertarismo se caracteriza mejor como la propiedad de uno mismo (en el sentido de propiedad del cuerpo) y la compatibilidad con la regla Lockeana de la apropiación de los recursos escasos sin dueño combinada con el derecho de transferir contractualmente esos recursos apropiados. El Principio de No Agresión (NAP) es una codificación sencilla de esto pero no es primaria sino dependiente o derivada. El punto de vista libertario básico consiste en: las reglas justificadas de conducta personal son aquellas que cumplen con la regla básica de que cuando hay un recurso escaso sobre el cual existe la posibilidad de un conflicto, debería existir una norma especificando un propietario a efectos de que el conflicto pueda ser evitado y el recurso pueda usarse pacíficamente y productivamente, y esta norma es: (a) en el caso de cuerpos humanos, cada persona tiene un mejor derecho sobre su propio cuerpo, simplemente porque tiene el control del mismo, al menos prima facie mientras y a menos que realice alguna acción (daño, contrato, crimen) que cambie esta presunción que se efectúa por defecto; (b) en el caso de los recursos externos, la persona que haya reclamado primero el recurso será quien tenga el mejor derecho al mismo. En otras palabras, el reclamo más antiguo sobre un recurso será el mejor reclamo. En otras palabras: la propiedad sobre uno mismo más el primer uso y el contrato  (junto a reglas especiales para solucionar conflictos de daños o crímenes). No agresión significa que usar o invadir los límites, del cuerpo o los recursos adquiridos a la manera Lockeana, de otro es algo prohibido a menos que el propietario lo autorice. Es por esto que la teoría de la propiedad es mas fundamental que la idea de agresión; no podemos saber si el acto de fuerza de “A” para tomar un objeto poseído/controlado por B es un acto de derecho o una agresión a menos que sepamos quién es el dueño de ese objeto.

¿Cuántas sub-escuelas tiene la tradición austriaca?

EAdesdeAdentroEl Insituto Juan de Mariana organizó entre el 12 y el 19 de julio del corriente la VIII Universidad de Verano. Basta mirar el programa, los títulos de su conferencia y los nombres de los expositores para confirmar el nivel del evento. A los catedráticos que se repiten en cada Universidad de Verano como Carlos Rodríguez Braun, Miguel Anxo Bastos, Gabriel Calzada y  María Blanco, se han sumado invitados extranjeros como Alberto Mingardi de Italia o los argentinos Martín Krause y Walter Castro, además de contar con la presentación del Director del IJM, Juan Ramón Rallo, y otros miembros del instituto.

Personalmente tuve la oportunidad de asistir a esta Universidad de Verano en 2007, y al día de hoy recuerdo con entusiasmo la experiencia. Aquí los lectores pueden acceder a un resumen del seminario que escribí en mi antiguo blog.

Debo decir también que cada año recomiendo a mis alumnos y amigos libertarios que apliquen a las becas que ofrece el instituto y afortunadamente las consiguen. Este año Kevin Orelia de la Universidad Nacional de La Pampa en Argentina y Edgar Ortiz de la Universidad Francisco Marroquín de Guatemala consiguieron la beca y ya me manifestaron que el evento fue extraordinario.

Escribo este post por una consulta que recibí de algunos amigos que tuvieron la oportunidad de asistir al evento. Concretamente, por una afirmación de Juan Ramón Rallo acerca de las sub-escuelas que tiene la tradición austriaca hoy en día.

Actualmente, dentro de la Escuela Austriaca conviven tres sub-escuelas: la ortodoxamente praxeológica (Mises-Rothbard); la subjetiva radical e institucional (Hayek-Lachmann); y la neo-mengeriana (Fekete). Cada una con niveles de desarrollo muy distintos, por supuesto. ¿Alguna corriente más que se os ocurra?» [Juan Ramón Rallo]

Mi impresión general es que es muy difícil definir una clasificación como esta en la que podamos englobar a cada autor de la Escuela Austriaca. Piensen por ejemplo en dónde ubicar a los propios fundadores de la tradición como Carl Menger, Eugen Böhm Bawerk y Wieser y encontrarán problemas. Sigan con el propio Mises, y verán que una lectura detenida nos lleva a enormes dificultades. Tomen a  los asistentes del seminario de Mises en Viena y Nueva York y las dificultades continúan. Tomen a los autores más representativos de la tradición austriaca moderna, y aun así, habrá problemas. Finalmente, piense cada uno si puede calzar en alguno de estos tres sub-grupos y el problema persiste. Personalmente, no me sentiría cómodo en ninguno de estos grupos.

Un ejemplo bastante representativo puede ser Jesús Huerta de Soto. Basta leerlo para notar que no calza en ninguno de ellos. En el último Congreso Austriaco que también organizó el IJM se auto-definió contrario al pensamiento de Fekete, pero es claro que si bien sigue a Mises-Rothbard, también tiene una influencia enorme de Menger y Hayek. Puede observarse su trabajo sobre el Methodenstreit para confirmar su influencia de Menger, y también su tesis doctoral sobre el socialismo, para mostrar que su influencia proviene tanto de Mises como de Hayek.

Después de compilar esas 60 entrevistas a autores representativos de la tradición [La Escuela Austriaca desde Adentro, Vol. 1, 2 y 3], mi impresión es que no se los puede englobar en dos o tres ramas solamente. Tiendo a pensar que hay tantas «escuelas austriacas» como autores tiene la tradición, porque lo cierto es que no hay dos autores que piensen igual.

Dicho esto, específicamente sobre esta sub-división, me cuesta pensar qué es una línea Mises-Rothbard. Uno y otro pensaban distinto en muchísimos temas, a saber, su filosofía, su metodología, su teoría monetaria o su filosofía política. La línea Mises-Rothbard es lo que Rothbard tomó de Mises, dejando de lado todo lo que no le gustaba. Independientemente que el enfoque sea una mala lectura de Mises, o un enfoque superador de Mises, las contradicciones existen, por más que muchos deseen ignorarlas.

Más aun, Hayek y Lachmann… porque Hayek claramente no califica como subjetivista-radical. Creo que Ivo Sarjanovic lo dejó claro en aquel ensayo de 1989 titulado «El mercado como proceso: dos visiones alternativas«.

Sobre la tercera línea, no puedo opinar por desconocimiento, pero debo aclarar que los austriacos debemos celebrar el desarrollo de nuevos enfoques. El esfuerzo de Fekete y de Rallo de ir más allá de lo conocido y aceptado dentro de la tradición, es una nueva oportunidad para replantear los cimientos del enfoque.

Finalmente mi sugerencia para los lectores de este blog y para los jóvenes que se acercan a la tradición es que cada uno haga su propia sumatoria de aportes que tomen de diversos autores, más allá de que esto los conduzca a un enfoque particular, individual, y que poco les importe si este producto final califica o no de austriaco, en la medida que ustedes se sientan cómodos con él. Si no aceptan esto, estarán aceptando que otros piensen por ustedes, y no serán más que ovejas que persiguen al profesor elegido.

Al respecto, cada vez estoy más cerca del pensamiento de Milton Friedman y Carlos Rodriguez Braun en que sólo distinguen entre buena y mala economía, y se sienten incómodos de pertencer a una escuela o tradición. Ya no sabemos qué es austriaco (aunque haya diez elementos que nos identifique), y me parece que fuera de la tradición hay mucho que puede enriquecer nuestra lectura del mundo.

Dicho esto, sólo me queda compartir un extracto de una entrevista a Walter Block de 1999, que también tradujimos para el libro mencionado. Si bien disiento tambíén con esta sub-división, servirá para responder a la pregunta inicial.

Sigue leyendo

Sobre construcciones imaginarias e hipótesis ad hoc: ¿Qué elementos le faltan a la metodología de Rothbard (y Hoppe)?

ZanottiEn este post pretendo resumir qué aportes hace Rothbard a la metodología austriaca y qué elementos necesitamos agregarle para tener lo que yo interpreto como una correcta metodología austriaca.

Como aclaración previa debo decir que este campo de estudio no es mi especialización, pero lo escribo con el ánimo de continuar un debate que se abrió hace unos días con seguidores de la obra metodológica y de filosofía política de Hoppe.

Asumiré que el lector ya conoce el libro de Rothbard “El Hombre, la Economía y el Estado”, aunque no necesariamente sus otros libros. Y asumiré que el lector conoce el modelo de Garrison desarrollado en Tiempo y Dinero, al menos en las consecuencias de un aumento de ahorro voluntario, porque será útil al intentar sistematizar el mensaje. Finalmente, mostraré –siguiendo a Zanotti-  que Machlup y Hayek pueden complementar el aporte de Rothbard para una mejor comprensión metodológica del análisis económico.

Sigue leyendo

Hacia una síntesis entre el liberalismo clásico y el anarquismo de derecha – Por Pablo Pozzoni

Rothbard_HayekEn los últimos días, se han generado en el blog discusiones aquí y aquí en torno al liberalismo clásico de Hayek -representado también en el orden espontáneo-, y el anarcocapitalismo de Rothbard -representado en el principio de no agresión-. Si bien ambas posiciones se presentan como antagónicas, algunos autores han intentado mostrar su consistencia. Al respecto, sugiero la lectura del post de Pablo Pozzoni escrito en su blog en 2007 titulado «La propiedad privada como libertad y liberación. Hacia una síntesis entre el liberalismo clásico y el anarquismo de derecha

Al menos dos referencias me parece importante tomar de este texto, y someterlas a discusión. En la primera dice Pablo Pozzoni:

Las postura liberal clásica hayekiana y la anarcocapitalista rothbardiana no deberían ser entonces mutuamente excluyentes, aunque postuladas como están es inevitable. Pero esto es así, creo, por algunos errores en las premisas que, como se ve, no están en sus postulados básicos, sino que por el contrario entran en contradicción con estos.

Y sobre el final concluye:

La síntesis liberal, creo, está en la naturaleza de la propiedad privada. Por eso no se trata de buscar la abolición del Estado, sino su absorción ordenada por parte de la sociedad civil, mediante las mismas fuerzas del mercado. Si su naturaleza era contradictoria con el mercado o no lo era, se probará evolutivamente. No hay por qué desesperarse en un sentido o en el otro. La solución se hace en función de la propiedad privada, y por eso la postura debe ser antes que nada privatista. Si este principio se perjudica, se retrocede y se busca una solución mejor, y se sigue adelante. El principio de no-agresión y el orden espontáneo son aquello «social» que no cambia en el cambio, pero que hacen el cambio creativo «interpersonal» posible, esto es, la fórmula que hace posible la sociedad abierta como la percibieron Henri Bergson y Karl Popper. En pocas palabras: evitar el dominio del poder en las relaciones humanas, mediante una legislación general contra la violencia.

¿Es Hayek un mito? – Parte II

Rothbard_HayekHace unos días, subimos al blog un post con el debate abierto por H. H. Hoppe acerca de si Hayek es o no un mito. Decía entre los comentarios, que falta una sistematización de la filosofía política de Hayek para comprender mejor su obra, tal como la que Gabriel Zanotti hizo con Mises. Pero el mismo Gabriel se ocupó de mostrarme distintos pasajes en los que trabajó la filosofía política de Hayek, con lo cual se puede concluir que este trabajo está hecho. Se que es largo, pero el comentario de Gabriel vale la pena, y esclarece muchas de las cosas que estamos discutiendo.

Por mi parte, sólo quiero agregar dos comentarios:

1) Hayek y Rothbard tienen dos formas distintas de trabajar. Mi impresión -y se que esto va a dar lugar a otro enorme debate- es que Rothbard es constructivista (algo que debatimos hace un tiempo en otro post). Planifica un ideal de sociedad anarcocapitalista, y luego trabaja en desmantelar al Estado para alcanzar ese ideal. Esto queda claro también en la defensa anarcocapitalista de Jesús Huerta de Soto, que Nicolás Cachanosky critica en un artículo publicado en este post. Este no es el modo de trabajar de Hayek. La obra de Hayek, enfatizando el estudio del cosmos y el taxis, y también de los ordenes espontáneos, sirve para ver cómo llegamos a donde estamos. Por eso mientras Hayek considera central el estudio de la tradición del orden espontáneo, Rothbard prácticamente no le da lugar. A Rothbard le incomoda el orden espontáneo. Hayek analiza el proceso que nos trajo a donde estamos, y sólo a partir de esa comprensión, piensa que se puede analizar la posibilidad real del anarcocapitalismo. Hayek no puede en su modo de ver y entender el mundo, sugerir que el anarcocapitalismo es el ideal. Más bien, analiza hacia dónde irán los órdenes espontáneos, y deja la puerta abierta a que el estado final sea ese anarcocapitalismo que Rothbard promueve.

2) Dicho esto, me parece que a este debate hay que agregarle el condimento de Buchanan. El punto que merece discusión es si el anarcocapitalismo es posible, o si más bien, encuentra un límite. Al respecto, Buchanan publicó en 1975 «The Limits of Liberty: Between Anarchy and Leviathan», que también está traducido al español bajo el título «Los límites de la libertad» (Tapa, prólogo y prefacio aquí: http://www.katzeditores.com/images/fragmentos/Buchanan.pdf).

Al comienzo de este libro, Buchanan cita un pasaje de F. Knight que debería estar en el corazón de este debate:

Y el problema principal, más serio, del orden social y el progreso es […] el problema de hacer que se obedezcan las reglas, o de evitar que se haga trampa. Hasta donde puedo ver, no hay una solución intelectual a ese problema. Ninguna maquinaria social de “sanciones” evitará que el juego se desintegre y se convierta en una discusión, o en una pelea (¡el juego de ser una sociedad rara vez puede tan sólo disolverse!), a menos que los participantes tengan una preferencia irracional por que siga, incluso cuando, a nivel individual, parecen llevarse la peor parte de él. De lo contrario, se deberá mantener la sociedad por la fuerza, desde fuera (porque un dictador no es miembro de la sociedad en la que manda) y entonces será cuestionable que se la pueda llamar sociedad en el sentido moral.»

Frank H. Knight – “Intellectual confusion on morals and economics