Apple versus Samsung II

Martín Krause subió un post hace unos meses acerca del debate entre Apple y Samsung. El debate fue tomando relevancia con el tiempo, y hoy ya es una discusión de nivel mundial. ¿Cuál es el límite a las patentes?

La UFM junto a una serie de expertos para abrir la discusión y los alumnos disfrutaron de un serio debate sobre un tema delicado. Aquí el video de este debate.

Mi pregunta a los lectores va más allá de este caso concreto: ¿Qué argumento podemos ofrecer para justificar las patentes?

7 comentarios en “Apple versus Samsung II

  1. Para mí argumentos puramente utilitaristas: Nadie va a invertir en gastos de inversión y desarrollo si el Estado no le garantiza la explotación exclusiva del resultado de su idea. Hayek advirtió sobre las palabras comadreja, aquéllas que vacían de contenido una idea, dejando el exterior intacto. Tal es el caso de «social» en «justicia social», la cual no es ni justicia y es anti-social, por cuanto perturba el proceso de cooperación social. Lo mismo sucede con la denominada «propiedad intelectual». Como los liberales defendemos la propiedad, al incluir la palabra propiedad a ese concepto nos sentimos incluinados a defenderlo si no profundizamos un poco más en el concepto. Una patente es un privilegio otorgado por el Estado a unos particulares que restringe la competenica. Una idea no es propiedad exclusiva de su autor. Es como cuando el empresario de Kirzner descubre una oportunidad de ganancia en su entorno y actúa para apropiarse de ella, no puede impedir que otros empresarios lo imiten, a menos que obtuviera un privilegio por el Estado. No podemos evitar que otros se beneficien de nuestras ideas. La propiedad intelectual no es propiedad, la cual es un derecho, sino es un privilegio que restringe la actuación de otras personas. Usar una idea ajena no es una trangresión a su propiedad privada, todos lo hacemos todo el tiempo. No se puede hablar que los distintos usos que se le puedan dar a una idea sean escasos, como sí sucede con los recursos materiales, y que por tanto se tengan que asignar mediante derechos de propiedad.
    Es distinto el caso del plagio y del fraude, cuando alguien vende como propias ideas ajenas o cuando vende un producto diciendo que fue fabricado por un fabricante distinto a quien en realidad lo hizo, pero aun en esos casos, el damnificado no es el productor original sino es el consumidor, el daño se hace contra el consumidor y es el consumidor quién podría presentar cargos.

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  2. >Nadie va a invertir en gastos de inversión y desarrollo si el Estado no le garantiza la explotación exclusiva del resultado de su idea.

    ha ha ha

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  3. Para analizar este problema me haría dos preguntas:
    1. Una persona puede tener propiedad sobre las ideas?
    2. En caso de tener la propiedad, cual es la mejor forma de protegerla?. Con un monopolio estatal o por algún medio descentralizado?.

    La pregunta 2 creo que es mas fácil de responder. El problema complejo está en la pregunta 1.
    Sin entrar en cuestionamientos éticos, las ideas son básicamente un bien no rival que puede ser usado por varias personal a la vez. Este bien (las ideas) son un insumo para la fabricación de otros bienes.
    Dicho esto, y abstrayendome un poco, creo que básicamente nos encontramos con efectos contrarios:
    1. Por un lado si uno puede tener propiedad de una idea, y puede comerciar con esta ( vender y comprar ideas ) entonces se incentiva la creación de nuevas ideas, básicamente porque se creó un Mercado. El problema aquí es que las ideas no se desparraman tan rápidamente en la sociedad.
    2. Si uno no puede tener propiedad sobre una idea entonces se incentiva el derrame de esta idea rápidamente en la sociedad, produciendo nuevas innovaciones. El problema de esto es que se quitan los incentivos a innovar.

    No veo una solución a priori a este problema.

    Una vez dicho esto, creo que hay que preguntarse sobre la practicabilidad de los derechos intelectuales, es decir, hasta qué punto pueden ser cumplidos en el mundo real. Esto viene de la mano con la pregunta de cuál es el mejor sistema para hacerlos cumplir.
    Es posible crear un mercado de ideas?.
    En el mercado de la música este problema queda claro: Si no existen derechos de propiedad intelectual entonces cualquier persona podría hacer «covers» de las versiones originales. Este efecto claramente desincentiva la creación de nueva música por el artista original pero genera un derrame sobre los otros artistas!. Al mismo tiempo aparecen efectos que no se están tomando en cuenta, como la mayor difusión y por ende mayor entrada de dinero en recitales!.

    Pero el cuestionamiento que yo hago es que no veo motivos para pensar a priori que un sistema sería mejor que otro. Acaso el ingreso de dinero por recitales más que compensa la pérdidas?. No lo sé

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  4. Edgardo dijo:
    «idea no es propiedad exclusiva de su autor. Es como cuando el empresario de Kirzner descubre una oportunidad de ganancia en su entorno y actúa para apropiarse de ella, no puede impedir que otros empresarios lo imiten, a menos que obtuviera un privilegio por el Estado. No podemos evitar que otros se beneficien de nuestras ideas»

    El empresario tiene todos los incentivos para tratar de proteger sus ideas, por ninguna razón estaría dispuesto a «regalarlas» al mundo. Luego esto no ocurre por un problema de practicidad, no existen maneras eficientes de protegerlo del «robo» (ni por medios estatales monopólicos ni por medios privados). Como bien dice, «no puede impedir que otro empresario lo imite».
    Ahora bien, esto no me parece una idea que necesariamente tenga que ser así para siempre. En el futuro quizás existan métodos que garanticen al empresario la propiedad de sus ideas, métodos que no necesariamente tengan que ser estatales!.

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  5. No se si han tenido tiempo de ver el video del debate. Julio Cole presenta allí varios argumentos en contra de las patentes. Por ejemplo, contradice la idea de que sin patentes, los empresarios no innoven o emprendan. Los empresarios hoy están más preocupados por ser los primeros en patentar, que ser los primeros en innovar. De hecho, cualquier patente que hoy tomemos, hoy no la posee concretamente el que innovó, sino el que tuvo el departamento de Legales más amplio y preparado. Dice Cole también que las únicas industrias en donde tendría cierto sentido las patentes, es en las medicinas y en los químicos. El costo de investigar la cura al cáncer es enorme, la probabilidad de éxito es muy baja, y entonces no hay incentivos para invertir en esto. Una patente estimularía la inversión. Pero la pregunta que surge es cuánta gente especialista hoy está invirtiendo en la cura al cáncer y si realmente lo hacen por la patente.
    No soy un experto en el campo, pero mi impresión es que los costos de las patentes son tan altos y los beneficios tan pocos, que no se justifican.

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  6. Las ideas comparten ciertas características con los denominados «bienes públicos»: no hay rivalidad en el consumo y no hay exclusión. Para ambos casos, sin embargo, la solución la ofrece el propio mercado. Mediante la tecnología se logra excluir a quienes no pagan y esto sin necesidad de que los gobiernos se inmiscuyan en las actividades de los ciudadanos. Dinamicamente surgen las instituciones más eficientes. No hay necesidad de que el gobierno otorgue monopolios, con todos los problemas asociados, para resolver esos problemas. Los argumentos utilitarios caen por su propio peso porque uno no puede conocer ex-ante todas las consecuencias de la legislación positiva. Es fácil hablar sobre lo que se ve, lo que nunca veremos es lo que no se llegue jamás a dar gracias a que ciercas compañías tienen el privilegio de utilizar determinada idea o técnica. Yo no veo ninguna justificación de principio para las patentes y las utilitarias no me parecen contundentes.

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  7. No hay ninguna. http://austroanarquistas.com/?p=3401
    En todos los campos en los que no ha habido protección de las ideas por parte del Estado (véase la moda, la gastronomía, los trucos de magia) ha emergido un sistema de reconocimiento de autoría, estatus y honor.
    http://www.ted.com/talks/view/lang/es//id/866

    El caso de los medicamentos es más complejo, aunque los principios son los mismos. Eliminar la regulación e intervención de instituciones como la FDA igual permiten aumentar la inversión en investigación.

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