Columna en Portfolio Personal sobre qué tan atractivo es Argentina a los ojos de inversores internacionales.
Al asumir el nuevo gobierno, Mauricio Macri y sus ministros esperaban una “lluvia de dólares.” Ya acercándonos a al año y medio de gobierno, aún no se perciben los tan esperados “brotes verdes.” Los datos del PBI para el 2016 muestran una contracción del 2.3%. El cuarto trimestre muestra una leve mejora del 0.5% respecto al trimestre anterior (desestacionalizado) [¿dentro del error estadístico?].
Los números muestran que Argentina aún no ha rebotado de forma clara. ¿Por qué motivos las inversiones se resisten a llover en Argentina? Es cierto que el paso del Kirchnerismo a Cambiemos ha implicado una mejora en las condiciones de inversión, pero sería errado concluir que el mero hecho de cambiar de gobierno es suficiente para atraer inversiones.